Una noche en el Olivar (1)

…Por sobre todo lo vivido y por más duras que fueron las experiencias, Él siguió sonriendo; no se rindió. Desde entonces aprendió a proyectarse con pasión, inteligencia y perseverancia en todo lo que se proponía (anvague)

Era una noche diferente a las demás, en pleno Olivar, caminaban entre amigos en compañía de la lluvia y los cigarros por doquier. Todo parecía estar bien, la ocasión se prestaba para una larga noche de plática y de sesión de fotos. Entre plática, cigarros y lluvia se escuchaba la voz apacible de uno de ellos que mencionaba el nombre de aquel niño… sí… de aquel niño que tuvo una historia de nunca olvidar…. Y dijo… entonces ese niño de una sonrisa agradable y verdadera, inteligente y de buenos valores, con sentimientos nobles y con muchos sueños por cumplir no tenía malicia en su corazón, no tenía  maldad en nada, creía en todo y en todos, creía que era fácil vivir, que todo era hermoso y tranquilo, que todos se ayudaban entre sí. Es ese niño que un día comenzó a sufrir experiencias fuertes, aquellas que le dejaron marcadas para siempre, pues lo lastimaron más de lo debido. Lloró muchas veces en silencio sin decir nada a nadie de lo que estaba viviendo…. Sí así vivió ese niño…. Los que un día lo vieron pensaron que no sufrió… es que no conocieron su realidad, no conocieron su verdadera personalidad y nunca lo supieron porque él no lo permitió. Con el pasar del tiempo comenzó a darse cuenta de lo equivocado que estaba, que la vida no era como él pensaba y que si quería ser algo tenía que luchar día a día, minuto a minuto y cuidarse él solo de los peligros que le asechaban y no darse por vencido fácilmente por más duras que fueran las circunstancias que le tocara vivir…. Es ese niño que sin pensar convirtió en un chico grande…….

Las fuertes experiencias de la vida, la hipocrecía de las demás, la pelea por el poder y la doble moral de muchas que conocía convirtieron a este niño de aquella sonrisa agradable y verdadera en aquel chico grande, con porte, elegancia y realce; muy selectivo a la hora de escoger su círculo de amigos. Tenía la astucia de muchos de su entorno de saber cuándo, cómo y dónde ser elegante y diplomático para aniquilar a quien se inmiscuyera en sus planes o con lo que él quería. No era violento, sabía actuar sin que los demás se dieran cuenta, pues cuidada mucho su imagen ya que esa era su carta de presentación para llegar a conseguir su propósito. Conforme iban pasando los años se dio cuenta que tenía temple y coraje para perseverar con lo que se proponía, con lo que él quería. Aprendió a socializarse astutamente, a ser manipulador, calculador, controlador y de doble personalidad; cuando lo creía necesario mostraba un carácter tierno, dulce, bondadoso, humilde, alegre, de agradable sonrisa, sensible ante el dolor humano, emotivo y todos esos buenos valores que hoy en día se está perdiendo. Qué casualidad que todo lo que le hirió en el pasado lo adquirió como arma para defenderse, muchas veces de sus propios maestros.

Con tal de conseguir lo que se proponía no le importaba seducir a quien fuese necesario, para él todo lo que podía ayudarle a tener a control de sí era  bienvenido… es así que también tuvo que aprender a hacer el amor como nunca, a ser ingenioso, creativo en el momento del acto sexual, a jugar con las zonas erógenas…. Esta estrategia también le tenía más cerca de su caza. Sexualmente lo vivía al máximo, hacía que su carnada se sienta amada, tenida en cuenta en todos los aspectos y se sienta pertenecida recíprocamente, lo asumía como suya propia. Claro con las experiencias que ha tenido ha sabido canalizar la verdadera energía de hacer el amor, por eso para él entrar a la cama con personas mayores, frívolas y fuertes era adquirir verdaderas experiencias.

Su mente era ambiciosa y con deseos de superación; era vanidoso y algo superficial; era idealista y muy desconfiado por las experiencias que ha tenido. Lo que hacía lo hacía con pasión porque sabía que lograría algún beneficio o porque de verdad lo importaba lo que está hacía o por quien lo estaba haciendo. Era detallista y meticuloso, observador y miedoso a la vez. Su entorno era con mayores porque de cierta manera sentía que ellos le aseguraban protección aunque sabía que se enfrentaba con lobos feroces con una gama de experiencias que buscan a quien devorar. Era un niño grande, que conocía su gran inteligencia, que sabía hasta dónde podía llegar, conocía sus límites, se exigía mucho, era muy caprichoso, ambicioso y controlador, no se conformaba con poco. Conocía sus debilidades pero en lo posible no los mostraba porque lo sabía encubrir. Camufla muy bien sus temores, sus inseguridades, sabía qué estrategias utilizar en el momento adecuado y preciso. En otras palabras sabía qué mecanismo de defensa emplear. Es ese niño que aprendió a cuidarse y valerse por sí mismo.

No… No era un niño malo solo trataba de defenderse para que no lo hirieran más. Era un niño que a veces lloraba y sufría en silencio…. también sabía sonreír. Trabajaba con pasión y perseverancia para conseguir sus metas trazadas y hasta no cumplirlas no estaba tranquilo; aprendió a enfrentar a la vida. Con aquel pasado, ese niño ya no le temía a la vida porque aprendió a ser fuerte ante las adversidades. Llegó a una etapa en la que era él mismo; que vivía por él y para él. Era un niño muy interesante, sabía cuándo, dónde y con quien mostrar cierta personalidad. No actuaba por actuar, primero pensaba y luego actuaba…. no podía fallar. Era un niño pero no olvidaba que su acción tenía que ser de adulto con un pasado que ya no le hacía temblar, al contrario lo hacía más fuerte que lo impulsaba a luchar por lo que quería; era un niño que ya no le sorprendía nada porque aprendió a ser de piedra, es más ni lágrimas le quedaban. Cuando algo le salía mal era para que la próxima sea más precavido. Se escuchaba con coraje y se levantaba con más fuerza. No dejaba que nada ni nadie lo amilanen o humillen nuevamente. Era exquisito hasta para tener pareja; si le fallaban una vez ya fueron. Antes la vida se ría de él, después él se ríe de ella; antes los problemas lo derrotaban con gran facilidad, después él tenía la capacidad de vencerlos; antes muchos lo menospreciaban y lo ignoraban, después él pudo menospreciar e ignorar a quien no le agradaba

 ……….. De todas esas experiencias que adquirió, después de cada golpe, después de cada lágrima y por sobre todo lo vivido y por más duras que fueron las experiencias, Él siguió sonriendo; no se rindió. Desde entonces aprendió a proyectarse con pasión, inteligencia y perseverancia en todo lo que se proponía… Él fue ese niño y es esto un fragmento de lo que le pasó, de lo que le tocó vivir. Él es ese niño que tuvo sueños, aquellos que por mucho tiempo permanecieron en su niño interior y que no les dejó morir a pesar de lo vivió. Era un niño que solo quería vivir, qué de malo hizo para que le pasara tanto mal…. Qué fue su error???? Lo hicieron llorar, lo hicieron sufrir, palpó la indiferencia humana, pero no le quitaron sus verdaderos sueños y las ganas de salir a triunfar. Esto le llevó a convertirse en un niño que muchas veces a él mismo le daba miedo verse así mismo porque se daba cuenta de lo que se convirtió…….